Mostrarte ante clientes potenciales, agendar una cita, ofrecerles información nueva a tus clientes de toda la vida, dar a conocer un servicio o un producto, realizar una venta, una encuesta de satisfacción, compartir material sobre un evento (fotos y videos). Sí, todo eso y mucho más es lo que puedes hacer en una página web o sitio de internet.

Parece conveniente tener una, ¿verdad?

Por lo mismo, en realidad más que preguntarte para qué sirve una página web, lo que te sugerimos hacer es detenerte unos cuantos minutos y reflexionar: ¿qué quiero hacer? En serio, pregúntatelo.

¿Tienes una empresa y quieres tener presencia en internet? ¿Trabajas por tu cuenta, es decir eres “freelance” y deseas que otros conozcan tu trabajo? ¿Quieres dedicarte a la venta de productos? Esto por mencionar unos cuantos ejemplos solamente.

Una vez que hayas definido exactamente qué buscas, el siguiente paso es acercarse con expertos en diseño web (conversiones.com), contarles sobre ti y/o tu empresa y lo que quieres hacer para poder cubrir tus necesidades, y así generar un entorno que convierta tu inversión en una que te genere ganancias.

Cabe aclarar que una página de internet puede servir para variar cosas al mismo tiempo. Propiamente dicho, un sitio de internet está compuesto por una o más páginas web.

Si por ejemplo eres un fotógrafo freelance, sería una gran idea tener tu propio sitio de internet con varias páginas; una para que la gente sepa quién eres, otra donde muestres tus mejores trabajos, una en la que des a conocer los paquetes de fotografías que ofreces así como sus costos y promociones, un blog donde hables sobre cuestiones fotográficas y una más con información para contactarte y contratarte.

¿Qué tu empresa es grande y no necesita promoción? ¡Falso! ¿O por qué crees que toda gran compañía tiene un sitio de internet? No existe un medio a través del cual difundir información de forma más rápida que internet. A través de una página de internet te sirve no sólo para compartir todo aquello que deseas dar a conocer (un cambio de ubicación o de horario, una vacante, etc.), sino también para atender y responder lo que tus clientes sus quejas, dudas y sugerencias.

“Ok, ok: ya me quedó claro para qué sirve una página web o sitio de internet, o como sea que le digas. Pero si ya hice (o me hicieron) una página de Facebook o estoy en Twitter, ya tengo todo eso y sin pagar nada, entonces no necesito una página web, ¿o sí?”

Siendo completamente sinceros, las redes sociales son una gran herramienta, pero de ninguna manera están peleadas con los sitios de internet. De hecho, se complementan perfectamente.

Hoy en día es indispensable estar en redes sociales, pero nada le da más seriedad y confianza a un cliente para comprarte un producto o contratar tus servicios que un sitio de internet. Tu página de Facebook es un gran primer contacto, pero la página web será de gran ayuda para cerrar un trato. Contáctanos y descúbrelo por ti mismo.